Con camisas negras, más de un centenar de mujeres marcharon por la calle Nueva hasta la plaza 10 de Marzo, en protesta por tanto luto en el país y como símbolo de esperanza de una Venezuela que está rumbo a un cambio de sistema político.


Enfermeras, docentes y amas de casa se sumaron a esta jornada y expresaron cómo día a día cada hogar venezolano es un espacio de precariedad o sufrimiento. «Nos quitan los salarios, nos dan comida de pésima calidad y nos piden que como docentes vendamos tortas. Siempre lo hemos hecho, pero no hemos estudiado en este país para eso. Tenemos una profesión para aportar a su desarrollo y este gobierno violenta los derechos de los ciudadanos», expresó la ciudadana Jenny Regalado.


Para Claritza Gil es lamentable que se desmejore la calidad educativa y los niños hoy sean víctimas. «Serán jóvenes como menos posibilidades de desarrollo y crecimiento personal», agregó.


Xiomara Barreto, promotora del evento en nombre del Frente Amplio, dijo que la mujer Varguense se resiste a dejar que siga esta tragedia humana donde se violan los derechos humanos de los ciudadanos. «Vamos a seguir en la calle y el mundo tiene que voltear la mirada a este país que vive esta tragedia, pero vamos a salir de esto y no dejaremos las calles hasta lograrlo», afirmó Barreto.

Presión policial
La jornada que debió culminar en la plaza Los Calamares fue interrumpida por funcionarios policiales que colocaron conos al final de la calle Nueva para desviarla de la ruta prevista.